Pilar Rodríguez
Directora de Admisiones y Relaciones Públicas
Cuando hablamos de la comunicación con los padres, debemos tener presente que ellos nos están confiando lo más preciado que tienen: sus hijos. Estamos tratando y trabajando con seres humanos, no con materiales o piezas, por lo que nuestra sensibilidad, cuidado y tacto, así como transparencia, honestidad y sutileza, son de vital importancia.
El trato a los padres en un colegio debe ser respetuoso, colaborativo y transparente.
Debemos mantener una comunicación abierta y fluida para construir una relación de confianza en la que constantemente sepan acerca de las actividades escolares, el progreso académico y el desarrollo socioemocional de sus hijos.
Nosotros —personal y profesores— debemos estar disponibles para discutir las inquietudes de los padres y responder a sus preguntas. Debemos ofrecer orientación y apoyo para que ellos, a su vez, acompañen el aprendizaje y el desarrollo de sus hijos en casa.
Si surgen conflictos o desacuerdos, sabemos lo importante que es abordarlos profesionalmente y resolverlos de manera constructiva, manteniendo el enfoque en el bienestar del alumno. Sus opiniones, preocupaciones y sugerencias deben ser valoradas y consideradas.
En última instancia, la comunicación con los padres en un colegio debe ser un reflejo de una asociación positiva y efectiva entre la comunidad escolar y las familias, con el objetivo común de brindar la mejor educación posible a los estudiantes.
